
La Amoxicilina es un antibiótico semisintético derivado de la penicilina. La amoxicilina actúa contra un espectro de bacterias bastante amplio y es por esta razón que se suele usar como un antibiótico de primera opción, bien sea en humanos o en animales, en infecciones de distinto grado de gravedad. Puede ser empleada de forma oral o de forma intramuscular e intravenosa, y se puede encontrar en forma de cápsulas, tabletas, tabletas masticables, suspensión oral líquida y gotas pediátricas.
Fue probada por primera vez en 1972 y actualmente es comercializada a nivel mundial por GlaxoSmithKline bajo los nombres de Amoxil®, Clamoxil® o Augmentine®. Los antibióticos no tienen ningún efecto sobre los resfriados, la gripe y otras infecciones virales.
Indicaciones
La amoxicilina suele ser recetada en casos de infección en el tracto respiratorio (como bronquitis y neumonía), aparato digestivo, aparato genitourinario (gonorrea), infecciones de piel, tejidos blandos, oídos, nariz y garganta. La amoxicilina también está indicada en la enfermedad de Lyme (también conocida como la borreliosis de Lyme, enfermedad infecciones a varios órganos humanos).
Por otro lado, también se puede recetar la amoxicilina de forma preventiva, para prevenir la infección de carbunco en la piel y las infecciones de clamidia durante el embarazo.
Se toma generalmente cada 12 horas o cada 8 horas. Es recomendable tomar el medicamento hasta que termine la prescripción aunque su estado de salud ya haya mejorado. Igual como ocurre con otros antibióticos, la suspensión del medicamento antes del tiempo establecido hará que las bacterias se tornen resistentes al antibiótico. Si olvida tomar una dosis, tómela tan pronto lo recuerde. Sin embargo, si ya ha llegado la hora de la siguiente dosis no tome una dosis doble.
Reacciones adversas y contraindicaciones
- Aunque la amoxicilina (y la penicilina) tiene un amplio espectro, se ha descubierto que este antibiótico no es estable frente a beta lactamasas, por lo que no debe ser recetado y utilizado con infecciones referentes a esta bacteria.
- Al igual que con cualquier otro medicamento antibiótico, se han manifestado reacciones alérgicas a la amoxicilina -principalmente en pacientes que sufren de asma, alergias y fiebre de heno-, igual que efectos secundarios como fuertes náuseas, vómito, fiebre y diarrea, por lo que se recomienda mantener reposo e hidratación por lo menos por tres días. Se considera un antibiótico seguro para su uso durante el embarazo.
- La amoxicilina se usa con precaución en pacientes con afecciones en el sistema inmunológico, VIH, mononucleosis y leucemia.
- La amoxicilina también puede generar irritación en la piel y en los ojos, aumento de glucosa, dolor abdominal, disfunción eréctil, gastritis, fotofobia, hipersensibilidad y acidez. Por otro lado La amoxicilina contiene grandes cantidades de Sodio, por lo que las personas con dietas bajas en Sodio deben tomar medidas para no desestabilizar el cuerpo.
- En caso de sobredosis, llame inmediatamente a un médico, de la misma forma que si el paciente ya se encuentra inconsciente o ha parado la respiración llame a emergencias lo más rápido posible.
LA AMOXICILINA DEBE SER USADA ÚNICAMENTE BAJO PRESCRIPCIÓN MÉDICA.
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